5 métodos tradicionales para que los niños se coman la comida.

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 por Carlos C.

El avioncito
Típico método dirigido a los niños más pequeños. Consiste en darle la comida al niño haciendo divertidos recorridos entre el plato y la boca. El ejemplo más típico es el avioncito.

Dividir la comida en 2
Trata de dividir la comida en dos partes, haciéndole ver al niño que hay menos comida en el plato, cosa que le motivará más.

Figuras divertidas.
Muchas marcas de comida ofrecen ya atractivas presentaciones de sus productos. Por ejemplo, diferentes formas de pasta, atractivas sopas de letra para que se coman el caldo, etc…

Disfraza la comida Intenta disfrazar la comida bajo aspectos atractivos para el niño o mezclándolas con alimentos que les gustan. Te ponemos un ejemplo: Disfraza las verduras mezclándolas en una salsa de tomate y sírvelas con pasta.

Cocina con los niños. 
A todos los niños les gusta imitar a sus madres y padres; es por ello que uno de los juguetes más solicitados por ellos son las famosas “cocinitas”. Que mayor motivación para estimular el apetito de los más pequeños que cocinar junto a ellos! Que el niño participe cuando los padres están haciendo la comida, que vaya dando los diferentes alimentos o haciendo cosas básicas. Se sentirá participe de la comida y se la comerá con mayor motivación!

Recompénsale
Si no le gusta mucho una comida, recompénsale por comérsela. Puedes combinar una comida que no le guste mucho, con su postre favorito o con un segundo plato que le guste mucho. Obligándole primero a comerse el primer plato. También puedes recompensarle con ir al parque si se lo come, u otros juegos favoritos. Te recomendamos que primero pruebes los refuerzos positivos antes que los castigos.

No te muestres alterado
Si el niño se niega a comer y te intenta forzar a que le prepares lo que le gusta llorando o gritando, relájate y no le des mayor importancia. Si nos alteramos y/o cedemos a sus chantajes el asociará que si llora le harás una comida que le gusta, y repetirá esta acción más veces. Lo ideal es tomárselo con paciencia y que te vea calmado/a, y que no le muestres mayor atención de lo que requiere.